Gracias al apoyo de muchas personas, el Programa de Educación para la Paz ha superado el hito de llegar a más de 300.000 personas en 80 países.
Los beneficios han sido profundos, con participantes de diferentes culturas compartiendo los talleres que les han ayudado a despertar una profunda experiencia de esperanza y aprecio por la vida.
Una nueva serie de tres vídeos cortos nos muestra cómo el programa está transformando vidas en el estado de Quintana Roo, México. Es solo una de las muchas áreas en el mundo donde más y más personas están entusiasmadas con el programa y emocionadas de compartir sus experiencias contigo.
“Es una herramienta que me ayuda, para que podamos ofrecer opciones de felicidad y paz a nuestros alumnos. No hay nada mejor que lanzarse a esta experiencia”. – Julián Aguilar, Rector de la Universidad Tecnológica de Cancún
“Me dio una pauta para tratarme mejor, para entenderme. Y así llegué a quererme, a recuperarme”. – Juan Ramírez, gerente y antiguo cliente de la Clínica de Tratamiento de Adicciones Zazil
“Históricamente, la policía ha tendido a trabajar separada de la gente. La cultura del Programa de Paz ayuda a desafiar ese enfoque porque busca primero transformar este elemento, yo, el policía, estar en paz conmigo mismo”. – Valentín Contreras, Director de Formación Policial